MEMORIA PROYECTO
Casona de campo perteneciente a la tipología denominada “arquitectura das agras coruñesas”. De volumetría rotunda se configura como una casa bloque de planta rectangular de dos alturas formada por tres módulos cuadrados de 5 ó 6 metros de lado separados por muros piñones transversales que en un momento indeterminado se transformó ampliándose mediante la prolongación de la construcción inicial en un segundo volumen, un módulo de similares características que siguió un desarrollo perpendicular formando una “L” La edificación se ha recuperado para uso como vivienda, por lo que su adecuación funcional resulta compatible con la estructura tipológica original. No obstante, como la vivienda es de segunda residencia y ya no se vincula estrechamente a la explotación agrícola y ganadera, su uso no es plenamente coincidente con el programa y necesidades originales. Por lo tanto ha sido necesario realizar algunas actuaciones para acondicionar los espacios a las nuevas necesidades y de dotación de instalaciones para obtener los estándares de confort actuales. Así las partes de la planta baja anteriormente dedicadas a los animales y prácticamente en la oscuridad sin aperturas al exterior ahora son utilizadas por las salas principales lo que ha requerido la apertura de nuevos huecos en los muros. Salvo la incorporación de varios porches en las entradas a la casa que plantean una nueva relación con el exterior acorde con el nuevo uso, el volumen de la edificación se ha mantenido exactamente igual. La intervención ha sido por lo tanto respetuosa con la preexistencia y ha reconocido su valor preponderante en el proyecto. Las divisiones interiores, pocas, se dispusieron en la medida de lo posible como elementos casi muebles articuladores de los espacios sin apenas tocar los muros de piedra que se dejaron vistos en ocasiones así como los techos de madera incluso los inclinados que son los protagonistas del espacio: la combinación armoniosa de los tres materiales obtenidos de la naturaleza circundante, la piedra de pizarra y granito en muros y suelos, la madera de castaño de los techos y roble de las tarimas y el blanco de los revocos de cal reproducen actualizadamente la cualidad espacial cálida y acogedora que tanto ayer como hoy así rehabilitadas, caracterizan a estas casas íntimamente fusionadas con el territorio...
