Se trata de
revitalizar la península de Zorrozaurre, una zona ex-industrial de Bilbao,
colocando en la ribera del río principalmente actividades recreativas,
culturales y residenciales. Dos son los
elementos urbanos generadores de la propuesta: El sistema de canales de comunicación, optimizando la
relación del Hombre con el agua, y la manzana 100 x 100 metros como la dimensión modular del
conjunto. Desde el cuadrado todo lo demás.
Básicamente la
propuesta se compone de tres grandes proyectos de escala urbana: Dos centros urbanos en los extremos de la nueva isla creada,
pero perfectamente conectados con el tejido urbano existente. Estos
centros urbanos, generados por el sistema de canales y por las manzanas 100 x
100 metros contienen actividades residenciales, comerciales y administrativas,
así como algunos edificios para actividades singulares, recreativas y
culturales, estrategicamente situados. Entre los dos centros urbanos, en el medio de la isla, un
parque, y en el parque una torre, una torre polifuncional suficientemente alta, hito arquitectónico, para ver y ser visto desde la distancia.
